La columna de Juan Marco; Las malas influencias
En el proceso de la competición culturista hay en ocasiones la tentación de oír a otras personas que no son tu entrenador… Las Malas Influencias
Cuando se prepara a un atleta siempre hay que lucha con varias influencias externas. Como si uno no tuviera ya bastante contra lo que luchar. La falta de voluntad de ellos… cuantos hay que les gusta autoengañarse y van picando… Y cuando los pesas siempre te cogen peso…
«No sé qué ha pasado pero esta semana no me encuentro tan seco…, habrá sido el descanso». Y tú claro… te haces el loco y te dices… a ver cuando coño se va a dar cuenta que cuando yo preparo a alguien sólo entrando por la puerta del gym sé si me ha engañado esta semana o ese día… Sólo cuando dé los buenos días o buenas tardes… actitud de culpabilidad, mirada, manos, cara, cuello… como hablas… etc…
Autoengaño. Qué es válido para ellos? Puede, pero no para mi y haces de tripas corazón y te dices: si lo aprieto no compite… Después viene otra cuando no quede bien en la competición, quien tiene la culpa? El de siempre, es que no es bueno… «Pues yo siempre hice lo que me dijo mi entrenador…» Y una mierda! Después hay otra lucha y es el exceso de información tanto de internet… «Es que aquí pone que las cosas se hacen así…». El entorno, esta lucha es muy jodida; como tenga algún amigo culturita o familiar, o compañero de trabajo… con la Iglesia hemos topado.
Después de calentarle la cabeza al competidor que siempre está frágil de mente y que sin querer siempre ve la opción y que más comida tenga mejor…Y como sabemos cuanto antes se vea bien, mejor. Pero si coges el punto muy rápido se puede quemar mucho antes y también perder más tamaño… Pues es el día X el que uno tiene que estar en su máxima condición, cuando estás sobre el escenario… Pero claro si escuchas a esos el lío está servido. Y como en este país todos somos aprendices de todo y maestros de nada y nos gusta tanto darnos de enterados … y que estamos muy puestos … Ah que yo cuando me preparé lo hice así y salí bien… yo sé mucho.
Señores! Hay unas bases, pero después cada atleta es un mundo diferente y depende de tantas cosas como tipos de metabolismos hay. Hay quien tiene que comer mucho y otros apenas, y una cosa básica: los cojones los pones para entrenar? Cosa que hoy parece que esto sea lo de menos y que lo que se necesita es mucho dinero y que no falte de nada… Sea para un regional o para un nacional.
Otro punto que quería tocar es como nos olvidamos de reciclar… hoy sale caro de cojones… pero yo alucino si te tiras un montón de meses con mega dosis, qué quieres acabar y en nada de tiempo para que esté tu eje hormonal recuperado…Después pasa lo que pasa: «No tengo ganas de nada», «Estoy deprimido» o la líbido no existe… Otra cosa que se da mucho son las obsesiones convulsivas que acaban haciendo de nuestro deporte una pesadilla, acaban con problemas de ansiedad, depresivos por no lograr lo que ellos pensaban.
Y es que hay una corriente muy extendida por muchos, desde pedir un préstamo a sablear a lo amigos o familia. Es que con dinero voy a lograr todo… Vale que no seamos cretinos; el dinero hace falta; no es lo mismo ir en Mercedes que en un Panda. Pero eso no quiere decir que vayas a arrasar por más que metas dinero, porque un burro nunca será un pura sangre… Trucado será un borricote!
Si, la palabra mágica es esa que tenéis en mente, esa es la varita mágica: La Genética!
Que parece que no entra en la cabeza de muchos… Y después cuando te has gastado todo lo que tenéis y más, y te has buscado el mejor de los preparadores que hay, te hayas quedado con una mano delante y otra detrás, descubres que milagros no los hay!
Aunque dicho gurú, te haya puesto hasta las trancas, después viene el DESENGAÑO! «Esto no vale para nada…. Lo entregué todo y no he recibido nada…». Lo de siempre: a llorar. El dinero ayuda pero no es el milagro, como entrenas, como llevas la dieta, tu entrega, superarse a uno mismo… con nuestras limitaciones. Y que yo siempre lo he tenido claro: «Si, campeón… Copa y palmadita, fotos, comilona…». Un pastón. La semana siguiente nadie se acuerda de quien ganó y a otra cosa mariposa.
Tiene que haber entrega… pero no para dejarte la salud, el dinero o tu cordura. Disfrutad y sed felices! Esto son cuatro días… Y el resto, hay que seguir entrenando.
Juan Marco … Malas influencias… torpedear el trabajo de los demás…