La columna de Juan Marco; El culturismo y la sociedad 

Otro artículo del carismático entrenador de Culturismo Juan Marco. En esta ocasión la experiencia de la competición vista desde otro ángulo que todos han de tener en cuenta.

Por qué no somos aceptados, ni social, ni como deportistas?

Con los años que llevo en esto lo más normal cuando veo que alguien se dirije a uno es con afán de crítica. Siempre acaban soltando alguna que otra puya… envidia… bueno si, pero hay algo peor que el ser humano no soporta y es la intimidación ante un gran físico. Si a esto le unimos la forma de vestir de algunos … como cojones se meterán la camiseta??? Supongo que cuando la saquen tendrán que cortarla con tijeras… bromas aparte, se nos critica la dedicación, que vayamos con la comida a cuestas, que cómo puedes entrenar el 1 o el 6 de enero o el 1 de mayo… voluntad de superación … Lo paso bien, cual es el problema?

Ah! La falta de cojones de esos criticones para hacer nada en la vida. Y es que todo lo que sea ser diferente es ser raro para la mayoría de gente de la calle: «narcisismo!»  Ah! tú no compras ropa para disimular si eres gordo o delgado, te depilas, te haces las cejas, etc… La verdad es que un gran físico nosotros lo admiramos, sabemos lo que cuesta estar en forma. Que si mira qué venas… , a mi no me gusta eso… Ah, si??? Y después tú misma te tomas dos copas y te comes al boy!!

Lo de siempre, destruir.  Qué pasa? Que todos tenemos que ser iguales como borregos? Y lo que más gracia me hace, lo que dicen gordos o delgados: «Yo no me quiero poner como tú!» Un clásico… nuestra boca grande hace que será difícil que nos acepten como deportistas, en nuestro deporte es un monotema hablar de qué chuches usas y cuanto te pones… Y eso lo ganamos a pulsa, con los vendedores de humo ; «Haz esto! – Le dicen al chaval- Que te vas a poner de la Hostia».

El mercadeo del culturismo es bestial. Después están los tópicos: «son unos descebrados, no tienen fuerza, para qué tanto músculo…» Pues para ser féliz y tener voluntad de hierro para lograr objetivos. Y luchar, que al fin y al cabo que es la vida Luchar y luchar… El no pasar desapercibidos… y los demás girar la cabeza para ver. Como en Santa Susana, todo el pueblo lleno de culturistas de 42 países, vosotros creéis que tantos millones de practicantes nos podemos equivocar con nuestra forma de vivir¿

Que nos sigan criticando, yo haré con mi vida lo que llevo haciendo desde que tenía 15 años… mi pasión el hierro y son 41 años desde que empecé hasta que mi cuerpo aguante y orgulloso de ser culturista hasta mi muerte. Y si no tegusta, no me mires. Que yo a vosotros ni os miro. Ah! Pero muchos habéis probado el gimnasio pero hay que tenerlos bien puestos…

Juan Marco, uno más de vosotros, la gran familia culturista…